Por: Antony Beltrán, corresponsal de Antorcha Estéreo.
El jueves 15 de mayo de 2025, la prensa de la oligarquía informa que en zona rural de Cúcuta, la brigada 30 del ejército gubernamental junto con la policía, encontraron un laboratorio con la capacidad para producir hasta 2.800 kilos de cocaína al mes, pero dicen que solo encontraron 500 kilos del alcaloide y que supuestamente pertenecería al ELN, acusando directamente al frente guerrillero Carlos Germán Velasco Villamizar del Frente de Guerra Urbano Nacional, mencionan la incautación de varios materiales de preparación para esta sustancia sin tener capturas de verdaderos guerrilleros en estos hechos ni pruebas que realmente confirmen estas acusaciones, agregando que ha sido un duro golpe a nuestras finanzas, queriendo hacernos ver como narcotraficantes.
El estado colombiano que históricamente siempre ha estado de parte de la burguesía criolla, siguen utilizando su maquinaria mediática de mentira, buscando vincular al ELN con el narcotráfico y con esto deslegitimar nuestra lucha revolucionaria y popular. Nuestra política a sido muy clara frente al narcotráfico y se ha ratificado en los Congresos del ELN. Ninguna de nuestras unidades participa, ni mucho menos esta vinculado con negocios de droga, nunca hemos estado de acuerdo; Pero sigue escarbando sin encontrar pruebas reales, con acusaciones totalmente falsas.
El plan contrainsurgente junto con su guerra cognitiva continúa apuntando a la insurgencia urbana, manipulando la verdad, atacándonos con una doble moral, buscando engañar al pueblo colombiano, queriendo asociarnos con bandidos como Juan de Dios Bautista Martínez, conocido como Bambam, atrapado el 16 de mayo de este 2025 en la ciudad de Cúcuta por la fuerza del narco-estado, se le acusa a este delincuente de ser parte del ELN, sin tener pruebas contundentes que así lo demuestren, se sigue evidenciando que todo el montaje de propaganda que crea el estado es una total farsa.
Mientras continúa la guerra contra los que aun resisten ante el poder del imperio de los que están arriba; desde abajo seguimos viendo, como construyen sus proyectos de muerte y opresión para los más pobres, con el nacimiento del nuevo batallón de policía militar en el corazón del área metropolitana de Cúcuta, estrategia proyectada por la administración municipal para combatir supuestamente la inseguridad que ellos mismos han creado. No es casualidad que todo esto se de después del viaje que hizo el alcalde Jorge Acevedo hacia Israel, el mismo país que formo mercenarios y paramilitares para que tiñeran de sangre inocente nuestras tierras. Vemos con claridad las intensiones de este gobernante, como también sus deseos de enviar presos de la cárcel La Modelo de Cúcuta para el Salvador, con las políticas represivas de Nayib Bukele, otro títere más del imperio de los EEUU.
Somos parte de la misma población que ha sido golpeada por la explotación de los ricos y su neoliberalismo, que se ha visto reflejado en nuestra ciudad como por ejemplo: En el canal Bogotá, una de las casas más grandes para los habitantes de calle y que por más que salgan líderes y lideresas a denunciar este abandono, el alcalde se hace el de oídos sordos y no ha hecho nada para solucionarlo, otro vivo ejemplo es la falta de empleo y el trabajo informal, la creación de peajes que atropella el bolsillo de todas las comunidades o los desplazados que han llegado engañados con promesas incumplidas por parte del gobierno, agudizando aun más la crisis de los olvidados por el estado, a esto le sumamos las mas de 20 bandas que se disputan territorios para el micro-trafico, la extorsión y el sicariato que se ha vuelto el pan de cada día.
Pero también estamos nosotros, el Ejército de Liberación Nacional comprometido con el pueblo, acompañando las luchas sociales por la liberación, protegiendo al inocente, resistiendo al enorme ataque desigual de los poderosos que no desean que allá poder popular, aunque sea evidente el contubernio militar y paramilitar apoyado por las políticas de paz total de la que quiere imponer el gobierno, solamente para desarmar y desmovilizar al ELN. Seguimos respondiendo legítimamente ante su guerra sucia, informando la verdad que no desean que escuche Colombia, mientras que no allá un cambio estructural con paz, equidad y con justicia social, seguiremos en resistencia.
