Editorial Revista Insurrección N° 982
Comando Central (COCE)
Para cuidar el planeta la humanidad ya entendió que no basta con cambiar el clima, pues se requiere un cambio de sistema, y cuando cambia el Gobierno, pero la élite lo bloquea, queda evidente que además deben cambiarse el modelo económico y el régimen que lo resguarda.
La gente le reclama vida digna a este Gobierno, quien trata de hacer algunas mejoras mínimas, pero ni estas permiten la minoría que manda en Colombia. Vida digna para el pueblo es contar con sus derechos fundamentales, que deben ser garantizados por el Estado, pero todas las instituciones económicas y políticas del capitalismo mafioso se dedican a acrecentar la riqueza de la plutocracia dominante, mientras la gran mayoría es excluida y empobrecida; y para quienes protesten por esta vida indigna, el viejo régimen aplica el terror de Estado.
Si el Gobierno hace ruptura con la Doctrina de Seguridad Nacional, ya no aplicaría más la categoría de Enemigo Interno a los defensores de Derechos Humanos y demás líderes populares, con lo que cesaría el terrorismo de Estado vigente desde hace 8 décadas, en las que han perseguido y exterminado a los luchadores populares con la excusa de evitar la propagación de las ideas socialistas, genocidio al que denominan Guerra Fría, dogma impuesto por las potencias capitalistas occidentales integrantes de la OTAN, acaudilladas por Estados Unidos.
La tiene difícil este Gobierno para sacar al país de la esclavitud neoliberal, que condena a Colombia a morir pagando los intereses de una Deuda Externa que es impagable, por la que además el país debe entregar bienes comunes y recursos naturales, a cambio de que le sigan haciendo nuevos préstamos. Si intenta buscar otro modelo económico le cae encima la máquina de guerra del imperio norteamericano, que es el principal enemigo de que la nación colombiana tenga vida digna, porque al romper los grilletes de la Deuda Externa, se podría pagar la Deuda Social.
Luchar contra un imperio, es luchar contra sus agresiones, saqueos y esclavitudes; ojalá este Gobierno saque a Colombia de esa alianza de guerra que es la OTAN y deje de aplicar sus doctrinas y planes, ojalá se integre con el resto de países del Sur Global para liberarse de la esclavitud de la Deuda Externa, así no pasaría a la historia del país, como un gobierno que administró el capitalismo neoliberal y lo mantuvo en la Guerra Fría.
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