Editorial Revista Insurrección Nº 889
Comando Central (COCE)
Con los hechos militares de la semana pasada y la campaña mediática y de estigmatización contra el ELN, el país debe saber que las Fuerzas Militares siguen en ofensiva contra nuestras fuerzas y con un comportamiento terrorista, contrario a los preceptos éticos de la Guerra.
Esto último se constata, una vez más, en los hechos del 28 de enero de este año en el área rural de Buenaventura, cuando 7 guerrilleros del Frente de Guerra Suroccidental fueron capturados y ejecutados estando desarmados y en estado de indefensión, algo similar se presentó en la misma fecha en Mina Nueva, municipio de Remedios, Antioquia, cuando fue muerto fuera de combate y también en estado de indefensión, el Primer Mando del Frente José Antonio Galán, Luis Gabriel Zea Bernal.
Estos hechos fueron presentados por nuestra Delegación de Diálogos en la Mesa de Conversaciones en el Segundo ciclo, realizado en Ciudad de México, frente a ello mantienen total silencio los medios, las autoridades y en el mismo Gobierno. Es la prolongación de la impunidad del actuar terrorista de las Fuerzas Armadas estatales.
Estando activa la Mesa y el nuevo proceso de diálogos desde fines del año pasado, las Fuerzas Militares mantienen una ofensiva contra el ELN en distintos territorios, con el agravante que hoy al igual que en el pasado estas siguen apadrinando, promoviendo y actuando de manera conjunta con fuerzas narcoparamilitares.
Hay una realidad, el proceso de diálogos aún se está desarrollando en medio del conflicto, todavía no se ha pactado un cese bilateral del fuego, si bien ya estamos trabajando con el Gobierno para lograrlo, hay acciones de lado y lado no son sólo las del ELN, así la gran prensa, los militares y el gobierno muestren, escandalicen y satanicen la parte nuestra. Como fuerza contendiente, mientras no haya un cese y se nos siga atacando tenemos el derecho a la defensa y al accionar de respuesta.
A propósito de la acción militar del miércoles 29 de marzo realizada por el ELN en Guamalito, Norte de Santander, sabemos de los dolores que causan las acciones de Guerra entre las fuerzas contendientes porque los hemos sentido en carne propia; precisamente por ello, estamos trabajando una vez más por construir un Acuerdo de paz que saque la violencia de la política y propicie los cambios hacia un país con soberanía, con participación de las mayorías y con justicia social.
Reiteramos la voluntad y nuestra disposición para trabajar y alcanzar un cese bilateral del fuego, sus respectivos protocolos y los mecanismos de veeduría y verificación; con ello buscamos avanzar en los diálogos y crear un clima de garantías para la participación de la sociedad, en el examen de las realidades del país y en la formulación de las transformaciones básicas para habilitar un clima de paz.
Convocamos al Gobierno del Presidente Petro, a las fuerzas populares, progresistas y democráticas y al país entero a sumar esfuerzos hacia la paz, los cambios y por un nuevo país. A no permitir que sigan mandando los mismos de siempre.
Revista completa: https://eln-voces.net/insurreccion-889/
