Por: Comando Central (COCE)
Colombia está cerca de los 600.000 contagiados y los 20.000 muertos por Covid-19, con esta tragedia el Gobierno decreta el retorno a la vieja normalidad, en su afán de normalizar las ganancias de los súper ricos para quienes Duque gobierna.
La tragedia por la pandemia aminora su dimensión ante otra que también llena de dolor al país, consistente en la oleada de persecución y matanzas desatada contra quienes son críticos del régimen, exterminio con que amenazaron los seguidores de Uribe, cuando fue llamado ante la Corte Suprema de Justicia y puesto en detención domiciliaria.
Las últimas masacres de limpieza social y política las perpetraron en tierra natal de Uribe, el suroeste de Antioquia, con las que persiguen sembrar miedo y silenciar al país, para que no reclame por la vida y la paz, nobles propósitos contra los que este ex Presidente ha estado enfrentado durante los 40 años que ha ocupado cargos públicos.
Para que nunca se conozca la verdad del Conflicto Interno, el Gobierno prosigue en su maniobra para impedir que el capo narco paramilitar Mancuso regrese a Colombia; además de continuar monopolizando las instituciones que en teoría lo deben controlar, como la Procuraduría, entregada a una ficha del Clan mafioso de los Char, que está involucrado junto con el Cartel de la cocaína del Ñeñe Hernández, en comprar los votos que hicieron Presidente a Duque en 2018.
Los Partidos de la coalición de Gobierno pasan por encima de un Tribunal Superior y le hacen trampa a la Plenaria del Congreso, para autorizar el tránsito de tropas extranjeras en territorio nacional, con lo que la Brigada SFAB que envió Trump continuará haciendo la ‘Guerra contra las drogas’ en las Zonas de Futuro de Nariño, Cauca, Arauca y El Catatumbo, que conlleva potenciar los ataques abiertos y encubiertos contra Venezuela, asegurar la fumigación con Glifosato y lo que es peor, en tales Zonas recrudecen las masacres y el asesinato selectivo de líderes sociales y defensores de Derechos Humanos. Bajo las consignas por la vida y por la paz, numerosas iniciativas de la sociedad convocan a la movilización y la lucha para pasar la página de la Guerra, contra la corrupción, y por la verdad y la justicia como derechos inalienables de las víctimas; a este torrente de las mayorías nacionales, desde el Ejército de Liberación Nacional sumamos nuestro esfuerzo.