Saludamos al pueblo Colombiano y del Magdalena Medio que desde la brava Barranca ha estado presente en la resistencia y la lucha revolucionaria.
Nos permitimos informar que:
Nuestras fuerzas guerrilleras ejecutaron acción de sabotaje contra líneas del oleoducto Cira infantas al servicio de Ecopetrol, hoy 15 de octubre en el sector de Paquistán, en la vía entre Barrancabermeja y Bucaramanga.
Igualmente somos responsables de las acciones de sabotaje ejecutadas el pasado 12 de septiembre, contra dos líneas de oleoductos al servicio de Ecopetrol, en el corregimiento El Centro de Barrancabermeja. En estas acciones nuestras fuerzas se replegaron sin novedad.
Como ELN mantenemos a la nación y al gobierno la propuesta de abrir un debate con participación de la sociedad sobre el uso soberano de nuestros recursos minero-energéticos y en especial el petróleo. Reafirmamos que estamos dispuestos a discutir el tema del accionar contra la infraestructura económica a cambio de revisar y ajustar el precio de los combustibles, la eliminación de peajes y la distribución de las regalías, entre otros.
Asistimos a tiempos esperanzadores ante las movilizaciones de amplios sectores de la sociedad que exigen cambios estructurales, paz, derechos y equidad social; mientras la oligarquía criminal niega los reclamos de la gente imponiendo la violencia para seguir defendiendo los intereses imperialistas, y atornillada en el poder mantiene la guerra perpetua contra la nación.
Como insurgencia no somos infiltrados o terroristas, somos pueblo organizado levantado en armas. Creemos que cuando las vías para la lucha política legal están cerradas es legítimo el derecho a la rebelión. Pueblo colombiano cuenten con nosotros para seguir luchando por los cambios y la construcción de una nación más justa, más humana y equitativa.
COMANDO DE OPERACIONES ESPECIALES
ESTADO MAYOR NACIONAL
EJÉRCITO DE LIBERACIÓN NACIONAL-ELN
15 de Octubre de 2021
Es claro que la propuesta de efectuar un debate nacional “sobre el uso soberano de nuestros recursos minero-energéticos y en especial el petróleo”, no encontrará eco en las élites colombianas, toda vez que ellas no tienen voluntad política para propiciar transformaciones estructurales que invaliden la “crítica de las armas”. En tal sentido, la violencia estructural y el terror negro que agencian, justifican y legitiman el ejercicio del Derecho Universal a la Rebelión.