Editorial Revista Insurrección Nº 891
Comando Central (COCE)
Se dice que los cambios vendrán pero que ellos no aparecerán con la velocidad de los milagros, pasa el tiempo y lo que se aprecia es el freno que pone la élite dominante al Gobierno, que le impide realizar tan siquiera reformas simples.
El Estallido Social de 2021 ocurrió por la crisis social y humanitaria que provoca el capitalismo neoliberal, al lanzar al 80 por ciento de los colombianos al foso del hambre y la miseria, mantener al 60 por ciento de los trabajadores en el rebusque, sin derechos básicos, como la garantía de pensionarse y con la salud pública en manos de negociantes que la ofrecen como vulgar mercancía. Colombia sigue atada a un modelo económico de enclave en el que los extranjeros engordan con la extracción de bienes naturales propiedad de la Nación; para resguardar este jugoso negocio emplean su maquinaria militar y paramilitar buscando sofocar toda manifestación contra el régimen explotador y represivo.
El nuevo Gobierno poco ha podido cambiar esta tragedia nacional, para ello concurren la crisis fiscal en que recibió el país, la caída mundial de la economía y los obstáculos que colocan las clases dominantes a toda reforma que intenta este Gobierno, así estas apenas afecten levemente sus privilegios. La corrupción sistémica lo devora todo y para mantenerse intocable se atrinchera en todos los poderes del Estado. Bajo esta telaraña de fuerzas reaccionarias las promesas del Gobierno no han podido concretarse, empujando a las mayorías desposeídas a un nuevo Estallido Social.
‘Solo el pueblo salva al pueblo’, será de la mano de la protesta y movilización de la sociedad que vendrán soluciones presionadas en una democracia de calle, que haga lo que impiden hacer los tales representantes del pueblo que se sientan en las bancas del Congreso de la República; será con la presión social y una gobernanza de las comunidades la que se aísle, reduzca y transforme el corrupto poder imperante. El cambio y la paz que clama el pueblo colombiano vendrá de la lucha de las mayorías, porque las élites dominantes no regalan los derechos al pueblo, además los imperialistas y colonialistas cebados en la depredación y en monopolizar riquezas, siguen atravesándose a que Colombia supere el viejo régimen e instaure una Nación soberana, democrática, en paz y equidad.
Revista completa: https://eln-voces.net/insurreccio-891/
Me siento orgulloso de servir a mi pueblo, y más orgulloso de tener la fuerza elena de apoyo, para la emancipación de nuestra colombia.
Colombia para los que trabajamos en favor del cambio. Nupalom.