Por: Antonio Torres, corresponsal de Antorcha Estéreo.
A Santiago Uribe se le acusa de la conformación y liderazgo del grupo paramilitar “Los 12 Apóstoles”, que fue creado en Yarumal, Antioquia, a inicios de los años 90. Este grupo cometió más de 500 asesinatos y desapariciones, uno de ellos es del campesino Camilo Barrientos, fue asesinado en febrero de 1994 cuando prestaba el servicio de la ruta Yarumal, el homicidio de este hombre hizo parte de la mal llamada, limpieza social, como método de exterminio empleado por los grupos paramilitares en Colombia.
En el expediente se dice que Santiago Uribe permitió el entrenamiento de paramilitares en su propiedad y la celebración de reuniones para definir asesinatos. También se le señalaba de haberse reunido en su finca, con el coronel del ejércitoPedro Manuel Benavides y el mayor de la policía Juan Carlos Meneses, para atacar a la guerrilla que operaba en esa región de Antioquia. El juicio permitió develar el vínculo familiar de los Uribe con la historia del paramilitarismo.
El expresidente Álvaro Uribe Vélez, en defensa de su hermano, aseguró que el proceso estuvo influenciado por motivaciones políticas y afirmó que incluso el presidente Gustavo Petro había contribuido a crear una mala imagen de Santiago Uribe. Pero todos sabemos el verdadero entramado y vinculación que siempre han tenido, en donde han sido históricamente los mayores genocidas de nuestra historia colombiana
Le hacemos un llamado al pueblo, que sigan denunciando todos los crímenes cometidos en todos estos años, para que no siga habiendo impunidad, frente al terrorismo paramilitar «NI PERDÓN NI OLVIDO»