En Cali, el gobierno local es guerrerista

Por: Violeta Montoya, corresponsal de Antorcha Estéreo.

En las últimas semanas en Cali y su área metropolitana, se han presentado acciones que siembran terror por parte de las disidencias de las FARC y el paramilitarismo. A estas acciones, el gobierno local ni legisla ni garantiza la seguridad de las y los caleños. Pues el alcalde Eder en diferentes ocasiones en sus declaraciones públicas ha dejado clara su insensatez frente a la violencia y el terror que estos grupos han generado en la comunidad.

Además, que sus respuestas frente a la delincuencia común tampoco han sido las más acertadas, con respuestas como parar la publicación de videos en las redes sociales de los robos y delincuencia diaria de la que es víctima la población caleña. Demostrando una vez más que a pesar de la inversión constante en seguridad, no se resuelven las problemáticas estructurales, sociales y económicas de la sucursal, como parte de las causas de la delincuencia común.

Ahora, hace unos días en una nueva declaración pública Eder afirma y reitera que la fuerza armada del estado debería bombardear campamentos de los grupos armados y agrega “los bombardeos fueron claves para derrotar a las FARC, llevarlas a la mesa de negociación y desmovilizarlas”¹. Estas afirmaciones del alcalde Alejandro Eder evidencian su afinidad con la lógica guerrerista del régimen y la oligarquía, que cree que la guerra se ataca con guerra, dejando a un lado las fuertes afectaciones sociales y humanitarias a las comunidades, o situaciones tan graves como el bombardeo que dejó ocho menores de edad asesinados por las fuerzas armadas en el gobierno Duque.

Las constantes afirmaciones del gobierno local de Cali en cabeza de Eder, siguen negando las causas y las condiciones reales por las que en nuestra ciudad se presentan estas problemáticas sociales. La falta de oportunidades en especial para la población joven en la ciudad, genera como efecto que busquen otras alternativas para subsistir en un municipio con al rededor del 11,7% de desempleo².

A esto le sumamos que la gobernación del Valle, afirma estar invirtiendo en seguridad y hacer shows mediáticos con los supuestos positivos a cabecillas de bandas delincuenciales en el norte del Valle, sin embargo, cuando se le pregunta por la inversión real en seguridad como por ejemplo con la Tasa Especial de Seguridad y Convivencia Ciudadana que estuvo vigente hasta el año pasado y desde el 2016 viene cobrándose a los estratos 4, 5 y 6, sectores industrial y comercial³, la Gobernadora Dilian Francisca Toro no responde ante la población sobre el uso de dicho fondo.

Estos recaudos e inversiones que no aparentan transparencia, no están dando resultados para garantizar las transformaciones en materia de seguridad que requiere la región y la ciudad. Sumándose a apuestas guerreristas que solo buscan acabar la delincuencia sin importar los medios, como lo pretende Eder con los bombardeos.

Esta alcaldía guerrerista y complice del paramilitarismo, también tiene actualmente a Andrés Escobar quien es investigado por disparar a manifestantes en el estallido social como el líder de la Política Pública de Seguridad y Convivencia Ciudadana para 2024-2033.

Este accionar por parte del gobierno local de la sucursal lo único que lograrán es seguir afectando a la población civil que no solo vive las afectaciones de un sistema que no brinda oportunidades a la población empobrecida y a los históricamente excluidos, sino que ahora debe aguantarse la mala administración y la connivencia de la fuerza armada. Por eso seguiremos insistiendo en transformaciones que realmente nos lleven hacia una verdadera justicia social.